Cuento breve infantil (Versión de recuerdos)

El dragón Malvado ya hacía tiempo que tenía la manía de irse a vivir al castillo del dragón Bondadoso. Cada día su castillo era más desastrado, mientras que el del dragón Bondadoso era más bonito y brillaba mucho.
Una mañana, después de pensarlo, decidió quitarle el castillo a su vecino. Así que salió de su castillo y empezó a cruzar el valle que les separaba. Mientras tanto se reía ya que la cosa iba a ser coser y cantar. Aunque era un dragón solitario, por ser muy malvado, había oído decir que él era el dragón más fuerte y cruel de todo el mundo. Con su fuerza, maldad y malas artes estaba chupado quitarle el castillo al dragón Bondadoso. Seguro que se pondría a temblar en cuanto le viera llegar.
En un plís plás llegó a los pies de la colina, Y desde abajo gritó hacia el castillo del dragón Bondadoso:
- Dragón Bondadoso, quiero tu castillo y vivir en él. Como dos dragones no pueden vivir juntos, tendrás que irte. Tienes una hora para salir.
Y dicho esto, se tiró en el suelo y se puso a descansar, durmiéndose al cabo de poco.
El dragón Bondadoso, al oírlo, se puso a temblar. Se asomó muy despacito a una ventana y vio allá abajo al dragón Malvado. Parecía muy malo y grande. Y tenía cara de poco amigos.
Al dragón bondadoso no le gustaba vivir sólo, por eso estaba rodeado de otros animales. Ardillas, ciervos, conejos, moscas, perros, ranas y cualquier otro animal que quisiera vivir con él. Y los animales amigos del dragón Bondadoso también se pusieron a temblar.
- Tenemos que pensar algo dijo el pato-.
Todos los animales se pusieron a pensar, pero no se les ocurría nada. Por fin, la gaviota dijo: ¿Y si todos a la vez, como si fuera una voz, decimos Ahora salgo? De esa manera saldrá una voy muy fuerte y alta, y el dragón malvado pensará que el dragón Bondadoso es muy grande y se ira asustado.
A todos les pareció buena idea, unidos podrían ganar al dragón Malvado. Pero el dragón Bondadoso pensó que no sería suficiente. Así que siguió pensando y pensando hasta que de un salto salió corriendo. Se fue al patio para hablar con los escarabajos peloteros, diciéndoles que se unieran para hacer una pelota muy grande, tan grande que casi no pudiera salir por la rampa del castillo.
- La frase que tenemos que decir todos es Perdona por la cagarruta, ahora salgo dijo el dragón Bondadoso a los animales-.
Todos se pusieron a la vez a repetir la frase. En voy bajita, para que el dragón Malvado no les oyese. Mientras tanto, los escarabajos trabajaban sin para fabricando una pelota muy grande.
Cuando había pasado una hora, el dragón Malvado gritó: Sal del castillo o subo a por ti. De pronto se abrió la puerta del castillo y algo muy grande salió de él. Los animales empujaron la pelota de los escarabajos peloteros hacia abajo por la colina. Mientras lo hacían gritaron todos como si fuera una única voz:
- Perdona por la cagarruta, ahora salgo.
El dragón malvado vio como una bola gigante, más alta que él, se acerca a toda velocidad. Pensó que si esa era la cagarruta del dragón Bondadoso y si la voz era tan fuerte, debería ser el dragón más grande de todos los dragones. El dragón Malvado se puso a correr hacia su castillo y no paró hasta que cerró la puerta a cal y canto. Estaba muy asustado y pensaba que se había salvado por los pelos.
El dragón Bondadoso y todos los animales se felicitaban unos a los otros. Estaban muy contentos. El búho dijo:
- Ni el animal más fuerte y malvado puede ganar a todos los demás animales juntos.
6 comentarios
Lola -
Elisabeta -
Marta -
La historia está genial, se enseña que con inteligencia, se vence al fuerte (o brutote), y que el antagonismo malo-bueno es vital para, por ejemplo, los niños, que así pueden comenzar a formar sus propias ideas, basandose en lo que está bien y en lo que está mal.
Un beso!
Ninfa -
Isthar -
Me ha ecantado. Seguramente yo hubiese ayudado a gritar como el que más ;)
Ana -
Gracias por tu visita.